El desastre en Champions de ayer se veía venir, pero se veía venir desde que Valverde llegó hace dos años como entrenador, porque todos veíamos que era un entrenador del montón, un pelele, puesto ahí por Bartomeu para que la directiva siguiera haciendo y fichando lo que le diera la puta gana, y así es imposible.
Lo primero que tiene que hacer un buen presidente del Barça, o de cualquier gran club, es fichar a un buen entrenador, no a medianías, y que éste (y no la directiva) sea el encargado de planificar los fichajes de cada temporada. Valverde es un mediocre, alguien que ni en sus mejores sueños pudo llegar a soñar que iba a entrenar a un equipo como el Barça,
Hace años que vengo diciendo en este blog, y antes en el de Pulina, que Klopp era uno de mis entrenadores preferidos, un grandísimo entrenador al nivel de Guardiola. Pues es lo que ha marcado la diferencia en esta eliminatoria, un Liverpool con un gran entrenador contra un Barça con un entrenador medicore, repitiendo los mismo fallos (parece increible) que cometió en la ida, por mucho que marcáramos tres goles.
Pero presidentes mediocres como Bartomeu, otro que ni en sus mejores sueños pudo pensar que podría llegar a ser presidente del Barça, ponen a entrenadores mediocres al mando para que no les hagan sombra. Luego, eso sí, el problema para esta juntuza era Laporta, el mejor presidente que ha tenido el Barça jamás.
Pues de esos barros vienen esos lodos. Ayer era un partido claro para jugar con un 4 4 2 con Semedo en el lateral y con Coutinho en el banquillo o ni convocado, pero no, el super entrenador Valverde salió con el mismo equipo que recibió un baño en el Camp Nou a pesar de que el resultado dijera lo contrario. Y lo fuerte es que si eso lo veo yo, que no soy entrenador, o lo ve el 99% de los culés con los que he hablado estos días... ¿cómo puede ser que no lo vea o no lo quiera ver un entrenador, de un supuesto gran nivel, que entrena a uno de los mejores clubs del mundo y que cobra varios millones de euros por hacerlo? Es completamente imposible de entender.
Lo peor es que nada va a cambiar. Si tuviéramos un buen presidente éste tomaría decisiones hoy mismo, pero no lo tenemos, lo que tenemos es a un inútil de primer nivel que no hará nada, seguirá con Valverde y seguirá trayendo mercenarios del montón a precio de oro.
Y es que éste es otro tema que también quería comentar, la diferencia de actitud y de motivación que había en el Barça de los canteranos con Messi, Xavi, Iniesta, Pujol, Piqué... a lo que hay en este Barça de mercenarios con jugadores como Coutinho, Dembelé, Malcom, Rakitic y otros muchos a los que se la suda todo y para los que la camiseta del Barça es solo una camiseta más de las que se van a poner en su carrera futbolística.
Teníamos la fórmula mágica, la fórmula cruyfista, que era jugar al ataque, con un estilo claro y con jugadores de la cantera y dos o tres cracks de fuera pero de primer nivel. Pero llegaron Rosell, Bartomeu y compañía y se cargaron la fórmula, porque ellos odian el cruyfismo, el guardiolismo y el laportismo, y se cargaron la cantera y se cargaron el estilo, porque ellos querían ganar con su método, y su método es el de Floren, el de fichar mercenarios como Neymar o como Coutinho, que se ha visto que es un rotundo fracaso, pero les da igual. Lo mismo que ha hecho Floren, solo paliado en el Trampas por sus contínuos robos en Champions mientras hacen el ridículo cada temporada en Liga.
Y por último me gustaría hablar de Messi, el mejor jugador del mundo y de la historia del fútbol pero que empieza a ser un problema para el Barça, principalmente por dos motivos: el primero, porque si sus amigos tienen que jugar por decreto pues gracias por lo que nos has dado, y que te hagan una estatua en el Camp Nou, pero adiós muy buenas y, el segundo, porque el equipo ya no juega a nada y solo parece esperar a que Messi lo solucione todo, lo que es imposible que consiga hacer en todos los partidos de la temporada.
En fin, esto no hay por donde cogerlo, si seguimos con Valverde, que todo indica que así va a ser, la próxima temporada será más o menos igual que esta, y si seguimos con Bartomeu pues tres cuartos de lo mismo, pero el soci está a lo suyo, más preocupado por sus aspiraciones independentistas y por pedir la liberación de los presos políticos que de preocuparse de su club y de lo que está pasando.
Visca Barça!!
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